viernes, 19 de julio de 2013

El lobo con piel de oveja de Esopo

       Pensó un día un lobo cambiar su apariencia para así facilitar la obtención de su comida. Se metió entonces en una piel de oveja y se fue a pastar con el rebaño, despistando totalmente al pastor. 
    Al atardecer, para su protección, fue llevado junto con todo el rebaño a un encierro, quedando la puerta asegurada.
     Pero en la noche, buscando el pastor su provisión de carne para el día siguiente, tomó al lobo creyendo que era un cordero y lo sacrificó al instante.

2 comentarios:

  1. excelente cuento, da una lección a quienes aparentan lo que no son ya que siempre lo que pretendas fingir te jugara encontra. ¿no crees?

    ResponderEliminar